martes, marzo 11, 2008

10 habitos dañinos para el cerebro

1. No Desayunar:
El desayuno es, en óptimos casos, el primer ingreso de nutrientes después de 8 horas, saltarse este alimento conlleva a un suministro insuficiente de nutrientes al cerebro y con esto daños a nivel celular.

2. Comer en exceso:
Para procesar comida el estomago demanda nutrientes, y nuestro cuerpo da prioridad a este proceso, si se sobre exige el estómago, nuestras funciones cerebrales disminuyen. Aparte de esto, exceso de comida ocasiona alza de presión arterial, causando también daño cerebral.
Con un alto consumo de carbohidratos, se exageran los niveles de azúcar en la sangre.

3. Alto consumo de azúcar:
No necesitamos añadir azúcar a nuestra alimentación, pues la encontramos en todos los carbohidratos. Cuando la llegada del azúcar se produce masivamente, nuestro cuerpo responde con insulina, en también exageradas cantidades. El azúcar es rápidamente almacenada y quemada, pero la acción de la insulina es demasiado eficaz y el nivel de azúcar en la sangre desciende por debajo del normal ya que el cuerpo continúa produciendo insulina incluso después de que dejamos de ingerir azúcar y se produce un estado de hipoglucemia, produciendo fatiga, depresión, falta de concentración y somnolencia.
Paradójicamente, consumir azúcar en exceso, lleva a disminuir la taza de azúcar en la sangre disminuyendo la actividad cerebral y física, logrando que nuestro cuerpo nos exija glucosa.

4. Abuso de alcohol:
El alcohol tiene en si mismo altos niveles de azúcar y aparte de esto, El alcohol destruye células cerebrales. Los alcohólicos que beben durante muchos años tienen más riesgo de sufrir daños cerebrales permanentes aunque dejen el alcohol porque, a medida que asa el tiempo, el cerebro va perdiendo su capacidad de regenerarse.

5. Mala oxigenación:
El cerebro es el órgano de nuestro cuerpo que demanda más oxigeno, permanecer en ambientes cerrados y/o contaminados disminuye el suministro de oxigeno y con esto la eficiencia cerebral.

6. Fumar:
En conjunción con lo anterior. Nuestras células con los años y la oxidación natural, no son tan eficientes como cuando llegamos al mundo. Y nuestro cerebro no está libre de esto. Sin embargo, este proceso natural se ve acelerado si sometemos nuestro cuerpo a agentes tóxicos, como el humo y la nicotina.

7. Falta de sueño:
Durante el sueño, disminuye nuestro biorritmo, respiración, actividades cardiacas y cerebrales. Por consiguiente nuestro cuerpo descansa. Si nos privamos de esto, es natural esperar un desgaste en todo nuestro organismo incluyendo el cerebro. Y Aunque todo esto suene lógico, es peor, ya que el desgaste ocurre para todos nuestros órganos y la sinergia existente en nuestro cuerpo hace que el desgaste sea exponencial; por ejemplo, la falta de sueño produce que nuestro estomago funcione mal, por ende, disminuye su eficiencia y nuevamente daña nuestro cerebro al no recibir los nutrientes necesarios.
Dormir con la cabeza cubierta, disminuye la concentración de oxigeno y aumenta la de dióxido de carbono causando daño cerebral.

8. No reposar en enfermedad:
La fiebre y presión alta, producen por si mismas daño cerebral, forzando nuestro cuerpo durante etapas de recuperación aumentarán el daño.

9. No Pensar:
Pensar es simplemente la mejor forma de entrenar y recuperar nuestro cerebro.
Memorizar cosas es así también la mejor forma de entrenar nuestra memoria ya que nuestro cerebro no archiva nuestros recuerdos en orden cronológico sino que en orden de acceso, en otras palabras, los recuerdos mas frescos son los que accedemos más recientemente.

10. No conversar:
Conversaciones inteligentes, de actualidad y de opinión obligan a nuestro cerebro a recordar sucesos, crear conexiones entre ideas y establecer patrones de orden sobre ciertos temas y criterios.
La interacción humana es el proceso cognitivo básico, por medio del cual el hombre es capas de saber lo que ocurre con su entorno, y así también traspasar un una idea a otro. No desarrollar esta habilidad se traduce en un atrofiamiento cerebral.